Como cada fin de semana, otro capítulo de Dragon Ball Super fue estrenado. El pasado 5 de noviembre se estrenó el capítulo 114 de Dragon Ball Super, el cual por fin nos presentó al nuevo guerrero del que tanto se habló en semanas pasadas.

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Bajo el título «¡El explosivo nacimiento de un nuevo Super Guerrero!», este episodio nos mostró el resurgir de una de las técnicas más emblemáticas del anime: la fusión Potara, la cual fue usada para presentarnos al nuevo personaje: Kefla (Kefura).

¡Advertencia: los siguientes párrafos pueden considerarse SPOILERS si no has visto el último capítulo de Dragon Ball Super!

Caulifla y Kale seguían en su lucha por vencer a Gokú. Mientras que la mayor de las hermanas intentaba alcanzar la transformación Super Saiyan 3 mediante esta pelea, Kale solo quería hacerse más fuerte junto a su persona más amada; sin embargo, el poder de ambas era insuficiente…

A pesar de la fuerza de Kale y Caulifla, la diferencia de poder entre ambos bandos se hizo evidente cuando Gokú alcanzó la fase de Super Saiyajin Dios.

Caulifla y Kale no tuvieron más remedio que usar los famosos pendientes Potara, esos aretes que llevan todos los Kaio-Shin y que con fusionarse crean una nueva súper guerrera.

Como suele suceder en cada fusión Potara, la nueva guerrera adopta la personalidad más fuerte de las dos personas combinadas y potencia el poder de ellas a niveles inimaginables. En este caso, Kefla es capaz de sobrepasar la velocidad y fuerza de un Super Saiyan God, dejando anonadado a Gokú, quien es incapaz de reaccionar a tiempo.