En una entrevista para Los Angeles Times, el actor Chris Hemsworth confesó haber ganado tanta musculatura para interpretar a Thor en la pantalla grande que, luego de unos meses, el traje del dios del trueno ya no le cupo.
"Fue gracioso porque obtuve el papel y de inmediato vi los comics y noté que Thor luce como Arnold Schwarzenegger. No quería llegar a eso, pero tenía que ponerme un poco más grande. Así que me puse a comer mucho y entrenar más", contó el australiano.
Sin embargo, el entrenamiento de Hemsworth no resultó cómo lo había pensado, pues, luego de algunos meses, su torso se convirtió en un "bloque" que no le gustaba para nada.
"Antes de empezar a grabar. Tuve una prueba de cámara. Entonces me puse el disfraz y ya no me quedaba. Las medidas las habían tomados solo tres meses antes. Tuve que cambiar de programa de inmediato. Ya no más levantamiento de pesas, solo ejercicios cardiovasculares", añadió.
