Un vídeo viral es aquel que se propaga rápidamente en poco tiempo, como si fuera un virus, de ahí el nombre. Se comparte entre usuarios bien a través de las redes sociales, por correo electrónico o por mensajería instantánea. Con una cámara digital, un portátil y una cuenta en YouTube, puedes producir, editar y distribuir una película con muy bajo presupuesto.
Puedes difundirlo en las redes sociales y en blogs fácilmente. Los contenidos virales suelen estar relacionados con las emociones y el humor pero realmente no hay una fórmula mágica, y aquí te mostramos elementos que tiene que tener tu vídeo para que sea viral.
- Para que el espectador vea tu vídeo tienes que captar su atención en los primeros siete segundos, y mantener esa tensión en todo momento y ser lo más breve posible, necesitas un mensaje corto y directo.
- Cuenta una buena historia o muestra un momento único. La trama tiene más interés cuando es algo original o cuando se presenta de una forma diferente.
- Un suceso inesperado hace que cautives totalmente a la audiencia. Como dice Albert Einstein, “la imaginación es más importante que el conocimiento”.
- Haz que el espectador se divierta, así tendrás más posibilidades de que se promueva. Suelen ser vídeos que se recuerdan con facilidad y que se muestran a otras personas para burlarse de ello o bien para disfrutarlo.
- El contenido tiene que tocar la fibra sensible. Cuando se produce una respuesta emocional, el espectador está más dispuesto a propagar el vídeo.
- Cuanto más real sea el vídeo, más impacto tiene en los espectadores. También se ha comprobado que aquellos con participación animal son más vistosos.
- Si entre tus amigos y conocidos hay creadores de tendencias, o bien participas en diferentes comunidades en Internet, las posibilidades de que se extienda el vídeo con mayor rapidez aumentan.
