Si te gustan los conciertos y te desconectas totalmente cuando estás en uno de ellos, pues debes sentirte respáldado ya que un estudio hecho en el 2014 en Australia afirma que quienes asisten regularmente a conciertos se sienten más felices en su vida en general.
La Universidad de Victoria fue la encargada de esta investigación que analizó a 1.000 australianos y determinó que lo aquellos que asistieron a cualquier evento musical sobresalían entre otros por tener el índice de satisfacción en su vida superior al resto.
El aspecto comunitario era la parte más importante, ya que escuchar música solo no causa el mismo efecto que hacerlo con una multitud de personas acompañandote y cantando el mismo coro, esto es lo que se determina como «bienestar social».
La música y las relaciones sociales están muy ligadas, según este estudio y comprendemos mejor la música por ser de gran ayuda en la regulación emocional.