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Ghostear: ¿Por qué me dejó de hablar de la nada?

Aprende a cómo reaccionar si una persona cercana te ha empezado a ghostear.

Me dejo de hablar de la nada
Me dejo de hablar de la nada

En las redes sociales se ha hecho popular el término ‘ghostear’, que hace referencia a convertirse en un “fantasma” en una relación. Es decir, romper la comunicación sin dar aviso a la otra persona. 

Pese a que puede ser en redes sociales, también puede presentarse en la vida real y en relaciones cercanas como: padres e hijos, esposos, jefe y empleados. 

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¿Por qué se hace la ‘ley del hielo’?

Si el ghosteo se realiza entre personas cercanas, es porque se utiliza para castigar emocionalmente y es un comportamiento indicador de la inmadurez. Esta forma de relacionarse puede ser aprendida de los padres que no saben cómo manejar los conflictos de mejor manera.

Hay que tener en cuenta que la ‘ley del hielo’ es usada para manipular, hacer sentir mal y hacer que aceptes su posición en la discusión. Recuerda que el castigador quiere hacerte sentir culpable y hacer que aceptes sus peticiones. Estas personas carecen de empatía y obviamente son manipuladores.

3 acciones para romper el hielo 

1. Inicia la conversación: Si la persona que te evita es tu jefe, dirígete a él en la mañana para decirle “buenos días”. Si no te responde quedará como mal educado, así que es mejor intentar hablarle de forma pública. Trata de hablar con la otra persona de manera normal y hacerle saber que su castigo no está funcionando. 

2. Hazle una invitación: Si es tu pareja, intenta invitarlo a almorzar a un lugar que ambos disfruten. Si la persona accede, significa que estás ganando terreno y serás quien de el primer paso para hacer las paces. No olvides hablarle de tus sentimientos y lo mal que te hace sentir ser víctima de la ‘ley del hielo’.

3. Pídele disculpas anticipadas: Las personas buscan 'castigar' a otros sin explicar por qué están molestos. Si bien es un acto de inmadurez, es indicador de que le importa mucho el problema que lo ha llevado a quitarte el hablar. Debido a esto, puedes empezar preguntarle qué fue lo que le molestó y cómo pudes ayudarlo. Intenta ser empático, pero no sumiso. 



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